Jaycee Dugard, el 10 de junio de 1991, tenía 11 años en ese momento, iba caminando sola hacia la parada del autobús, que estaba cerca de su casa en California. Donde siempre esperaba el autobús escolar.
En ese momento, un coche se detuvo junto a ella, utilizando una pistola eléctrica y de forma muy brusca, sacó a la joven con fuerza, sin que ella tuviera tiempo de reaccionar. El padrastro de la joven, Carl Probyn, la observaba a través de la ventana. Al instante intentó correr tras el vehículo con una bicicleta, pero sin éxito.
Inmediatamente se llamó a la policía y se inició la búsqueda. La búsqueda incluyó perros, aviones y varios agentes de policía. Todos los intentos fueron infructuosos.
Se acusa a la policía de haber fallado varias veces en este caso, lo que podría haber anticipado el rescate de la niña. La principal queja es que no investigaron a fondo lo que luego se descubrió que era una pista clave.
El padrastro se convirtió entonces en el principal sospechoso, fue acusado por la policía de ser el secuestrador de su hijastra, lo que le costó su matrimonio y le supuso el desprecio de la sociedad.
Fui acusado injustamente, perdí mi matrimonio y mi vida. La policía me convirtió en el único sospechoso y me arrojó al infierno.
declaró Carl Probyn, padrastro
Cautiverio de Jaycee Lee Dugard durante 18 años
La niña fue llevada a la casa de sus secuestradores, a unos 270 kilómetros de donde fue secuestrada. Los responsables del crimen fueron Phillip Garrido, y su esposa, Nancy. Organizaron juntos el secuestro.
Phillip no tardó en empezar a violar a Jaycee Dugard con frecuencia, lo que resultó en el embarazo de la joven. Tuvo dos hijas con su secuestrador, la primera nació cuando la víctima tenía sólo 14 años.
Ninguna de las niñas iba a la escuela o al médico. Se mantuvieron completamente aislados.
declarou oficial da polícia Fred Kollar em entrevista à imprensa.
La familia Garrido vivía con Dugard y sus dos hijos en una casa en la ciudad de Antioch, California. Mientras los Garrido vivían de cara a la calle, Dugard vivía con sus dos hijas en la parte trasera de la propiedad, en una vieja y sucia choza.
Detrás de la casa había un refugio, tiendas y pequeñas dependencias, donde Jaycee y las niñas pasaron la mayor parte de su vida.
declarou oficial da polícia Fred Kollar em entrevista à imprensa.
El pasado de Phillip Craig Garrido
Philip Garrido tenía amplio antecedentes penales, estaba en libertad condicional ya que fue condenado por violación y secuestro, cometidos en 1971. En su momento fue condenado a 50 años de cárcel, pero tras sólo 10 años de prisión ya estaba en libertad.
También es sospechoso de otros delitos en la región, pero sin pruebas concretas que lo incriminen.
Christine Murphy, la primera esposa de Garrido, lo describe como un «monstruo». Según Christine, era un hombre manipulador y agresivo, y que una vez, en un momento de rabia, intentó sacarle los ojos con un alfiler.
Garrido dijo que dejó de abusar de los niños tras el nacimiento de su hija menor. Sin embargo, su versión no coincide con la realidad: su última condena por delitos sexuales data de 1999, mientras que su hija menor nació 5 años antes.
Jaycee Dugard rescatada
Mientras Garrido repartía folletos religiosos en la Universidad de California, algunos policías detectaron un comportamiento sospechoso por su parte. En la comisaría se descubrió que el ciudadano era Phillip Garrido, que vivía en libertad condicional tras cumplir condena por violación.
Rápidamente, su agente de libertad condicional le convocó y acudió a la reunión acompañado de sus dos hijos, su mujer y Jaycee, a la que presentó con el nombre de «Allissa».
El agente, que ya había estado varias veces en casa de Garrido, nunca había visto a «Allissa» ni a las dos niñas. «Pensó que estas personas eran sospechosas», informó Kollar.
Incluso delante de la policía, Jaycee se resistía a decir la verdad. Fueron necesarios varios intentos de los investigadores para que la verdad saliera a la luz.
Mientras que algunos afirman que Jaycee sufría el síndrome de Estocolmo, razón por la que se mostraba reacia a hablar, otras personas creen que tenía demasiado miedo a decir la verdad debido a la manipulación que había sufrido por parte de su secuestrador desde que fue raptada.
Síndrome de Estocolmo: una persona sometida a un tiempo prolongado de intimidación, llega a sentir simpatía e incluso amor o amistad por su agresor.
Pero ante la insistencia de la policía, Jaycee Dugard dijo la verdad y el 27 de agosto de 2009 la joven tuvo la oportunidad de volver finalmente a los brazos de su familia. Unos minutos después ya estaba en contacto telefónico con su madre y ese mismo día tuvieron la oportunidad de reunirse.
Jaycee Lee Dugard tenía 29 años en el momento del rescate, mientras que sus dos hijas tenían 11 y la otra 15 años. Los tres gozaban de buena salud.
Phillip, acusado de un total de 26 delitos, fue condenado a 431 años de prisión, mientras que su esposa Nancy, fue condenada a cadena perpetua, pero como llegó a un acuerdo con la fiscalía cumplirá una condena de 36 años.