Inicio » Secuestro » Secuestro de Omar Bin On Ham, 26 años desaparecido

Secuestro de Omar Bin On Ham, 26 años desaparecido

Imagina la desesperación de una familia que busca a su hijo durante casi 30 años, solo para descubrir que él estaba a pocos metros de su casa, en la casa del vecino.

Omar Bin On Ham tenía 17 años y vivía en Argelia con su familia, siendo el hijo mayor. Paciente y cariñoso, prefería la compañía de niños y animales a la de adultos. Su mejor amigo era un perro que lo acompañaba en todo momento.

La ciudad donde vivía era histórica, con más de medio millón de habitantes, y los residentes solían desplazarse a pie para realizar sus actividades cotidianas.

En 1997, Omar asistía a una escuela técnica y, como de costumbre, salió a sus clases. Sin embargo, ese día no regresó a casa. La familia, preocupada por su desaparición repentina, esperó unas horas, pero al darse cuenta de que algo andaba mal, contactó a la policía al día siguiente.

En ese contexto, Argelia estaba en medio de una guerra civil que duró de 1992 a 2002, lo que resultó en numerosos secuestros y muertes. Los padres de Omar, conscientes de la gravedad de la situación, temieron que su hijo hubiera sido una de las víctimas de esa ola de violencia.

Desaparecido

Pasaron días, y luego meses, sin noticias de Omar. La familia distribuyó folletos por la ciudad, participó en programas de televisión para dar a conocer el caso y movilizó a los medios. Sin embargo, la esperanza se fue desvaneciendo, y muchos familiares comenzaron a aceptar que quizás no volvería.

La madre de Omar, sin embargo, nunca perdió la fe. Incluso en sus últimos días, antes de fallecer de cáncer, pidió a la familia que no detuviera la búsqueda, convencida de que su hijo estaba vivo.

Mientras la esperanza de la familia disminuía, un cambio inesperado comenzó a suceder. El perro de Omar, que había sobrevivido todos estos años, comenzó a comportarse de manera extraña. Durante un mes, iba a la casa del vecino, a unos 200 metros de distancia, olfateando puertas y ventanas.

Esta obsesión por el vecino llamó la atención de la familia, pero la situación tomó un giro trágico cuando el perro fue encontrado muerto en la puerta de su casa, envenenado. La muerte del animal generó sospechas y preguntas sobre lo que realmente estaba sucediendo.

Fuertes sospechas

Las sospechas aumentaron cuando una publicación en redes sociales reveló una intensa pelea familiar que involucraba al vecino, conocido solo como «B.A.». El hermano de B.A. lo acusó de esconder a Omar, mencionando detalles específicos sobre el joven, incluidos su nombre y el tiempo que llevaba desaparecido. Así, la familia inmediatamente contactó a la policía, que reabrió el caso.

Los policías fueron a la casa de B.A., quien, al abrir la puerta, parecía calmado y tranquilo. Negó saber algo relacionado con la desaparición de Omar y se ofreció para que los policías entraran e investigaran.

La búsqueda inicial no arrojó resultados, hasta que un policía notó una trampilla cubierta de paja. Al retirarla, descubrieron a Omar, asustado y atado, en estado de shock. Había pasado 26 años escondido en un agujero en el sótano, un lugar donde B.A. aparentemente guardaba ovejas.

Antes y después de Omar. Su rostro revela la desesperación vivida durante todos esos años. / Foto: globo.com

Traumas para siempre

Omar estaba físicamente bien, pero su estado mental era preocupante. Estaba traumatizado e incapaz de hablar sobre los años de cautiverio. Según informes, durante el tiempo que estuvo preso, podía observar a su familia a través de la ventana, pero una fuerza invisible le impedía salir y pedir ayuda.

Omar afirmó que creía estar bajo el efecto de una magia negra impuesta por B.A., lo que revela la profundidad de la manipulación psicológica que sufrió.

Además de B.A., al menos ocho personas fueron identificadas como cómplices en el secuestro. Los vecinos nunca sospecharon nada, creyendo que B.A. era un hombre común que vivía solo y llevaba una vida normal, a pesar de su situación peculiar.

Los investigadores también descubrieron evidencias de rituales extraños en la casa de B.A., lo que llevó a suponer que Omar pudo haber sido retenido como parte de un ritual.

Preguntas aún sin respuestas

Las teorías sobre las motivaciones de B.A. incluyen tráfico sexual y la creencia en «niños especiales», que son considerados valiosos para rituales mágicos debido a características físicas específicas. Omar poseía algunas de estas características, lo que podría haber atraído la atención de B.A. Los detalles del caso, las manipulaciones y la posibilidad de rituales oscuros hacen que la historia sea aún más sombría.

Actualmente, Omar está recibiendo apoyo psicológico y tratando de reintegrarse a la sociedad. Mientras tanto, el caso sigue generando interés y especulación. ¿Qué sucedió realmente durante esos 26 años? El futuro podría traer más respuestas y quizás más luz sobre esta tragedia que atormenta tanto a la familia de Omar como a la comunidad.

Seguimos acompañando este caso y publicaremos cualquier actualización al respecto, ¡manténganse atentos!

Deja un comentario