Tamara Mitrofanovna Samsonova nació el 25 de febrero de 1947 en Uzhur, que actualmente forma parte del Krasnoyarsk Krai en Rusia. Estudió inglés y alemán en la Universidad de Moscú.
Personas que conocieron a Tamara en ese tiempo, relataron que ya sufría de trastornos mentales. Se especula que fue internada al menos en tres ocasiones en instituciones psiquiátricas a lo largo de su vida.
Después de graduarse, se mudó a San Petersburgo, donde se casó con Alexei Samsonova. En el año 2000, su esposo desapareció misteriosamente y se cree que ella lo mató y se deshizo del cuerpo.
Comportamientos extraños
Tras la desaparición de su esposo, Tamara afirmó que ya no podía trabajar y necesitaba otra fuente de ingresos. Comenzó a alquilar una habitación en su departamento a inquilinos.
Una de las vecinas comentó que era habitual ver a Tamara paseando por las calles de la ciudad vestida con pijamas durante la noche. Solía ir al mercado y regresar durante la madrugada, y cuando le preguntaban, afirmaba que le gustaba comer de noche.
Tamara tenía conversaciones confusas con los vecinos; podría jurar que cada vez que salía de su casa, alguien entraba en secreto, revolvía sus cosas y cortaba su ropa. Cuando la vecina sugirió que debería llamar a la policía, Tamara dijo que los policías no serían capaces de resolver sus problemas.
En marzo de 2015, Tamara, entonces con 68 años, conoció a Valentina Nikolaevna Ulanova, de 79 años. Ambas vivían en la misma calle y al principio solo se hacían visitas mutuas.
Valentina estaba cerca de los 80 años y necesitaba ciertos cuidados de alimentación e higiene. Tamara se ofreció a ayudarla mientras se realizaban reformas en su edificio. Vivó en el departamento de Valentina durante varios meses, contribuyendo con las tareas domésticas.
Natalia, una amiga en común de las ancianas, se dio cuenta de que había pasado algún tiempo desde que habían tenido noticias de Valentina, así que llamó a su departamento. Todas las llamadas fueron ignoradas y ninguna de las dos mujeres respondía en la puerta. Se llamó a la policía.
«La abuelita descuartizadora»
Una vez que la policía logró entrar en el departamento, Tamara dio relatos desconexos y surrealistas. Cuando se le preguntó sobre el paradero de Valentina, contó que una madrugada encontró a su amiga tirada en el suelo y luego fue a preparar té; al regresar, Valentina había desaparecido.
Las imágenes de las cámaras de seguridad del edificio captaron a Tamara bajando las escaleras cargando bolsas pesadas. En julio de 2015, Tamara fue arrestada después de que la policía encontrara la cabeza de Valentina dentro de una olla.
Tamara no resistió al arresto y además confesó otros crímenes. Dijo que ambas discutieron por unos vasos que no habían sido lavados, y como le gustaba vivir allí, la única manera sería matar a Valentina.
La asesina viajó a Pushkin, donde logró persuadir a un farmacéutico para que le vendiera un medicamento recetado, el Fenazepam. Al regresar a la ciudad, compró una ensalada Olivier, uno de los platos favoritos de Valentina Ulanova, luego colocó 50 pastillas en la ensalada y se la dio a su amiga.
El Fenazepam se utiliza en el tratamiento de varios trastornos mentales, como la esquizofrenia psiquiátrica y la ansiedad. Puede ser utilizado como premedicación antes de la cirugía, ya que potencia los efectos de los anestésicos.
Después de desmembrar el cuerpo en pedazos pequeños, Tamara hervía la cabeza de Valentina dentro de una cacerola. Algunas personas especulan que realmente se alimentaba de partes del cuerpo de las víctimas, mientras que otras dicen que la cocción servía solo para desfigurar el rostro y evitar que la atraparan.
El cuerpo decapitado de Valentina Ulanova con miembros amputados, envuelto en una cortina de baño, fue encontrado cerca de un lago en la calle Dimitrov. El paquete no llamó la atención durante varios días, hasta que un residente local decidió revisar qué había en la bolsa.
Diario de asesinatos
La policía registró la casa de Valentina y encontró una serie de diarios que describían más de diez asesinatos. En ellos, daba detalles de las muertes, incluyendo nombres, cómo los había matado y qué había hecho con los cuerpos.
«Maté a mi inquilino Volodya, lo corté en pedazos en el baño con un cuchillo y puse los trozos de su cuerpo en bolsas de plástico y las tiré en diferentes partes del distrito de Frunzensky.»
Extracto del diario de Tamara Samsonova.
El 29 de julio de 2015, Tamara Samsonova fue llevada a juicio. Se le sometió a un examen psiquiátrico forense. El 26 de noviembre de 2015, los resultados determinaron que representaba un peligro para la sociedad y para sí misma. Tamara permanece internada en una institución especializada hasta la finalización de la investigación.
La policía continúa investigando la participación de Tamara en 14 asesinatos que ocurrieron en un período de 20 años.
El torso de un hombre también fue encontrado en la casa de la anciana. Informes de vecinos afirman que Tamara había comentado ocasionalmente que había tenido que matar a su suegra.
En su declaración a la policía, la anciana oscilaba entre lo real y lo insano. A veces afirmaba ser una famosa bailarina y luego cambiaba su discurso diciendo que era una exitosa administradora de hoteles.
Incluso llegó a afirmar que se alimentaba de sus víctimas y que su parte favorita eran los pulmones. Cuando se le preguntó sobre la motivación para matar a Valentina, dijo que eso le daría alrededor de cinco meses de paz antes de que alguien de la familia quisiera recuperar el apartamento.